La meningitis es una enfermedad muy grave (aún más si es de origen bacteriano) que inflama las membranas que rodean el cerebro y la médula espinal. A grandes rasgos,las bacterias meningocócicas pasan la barrera inmunitaria y llegan a la corriente sanguínea, pudiendo provocar una actividad de defensa que puede llegar a la autodestrucción.Su progresión en muy rápida y se dan casos de muerte cada año, además de que si el niño sobrevive puede tener secuelas severas como la sordera, la amputación de algún miembro o una pérdida sensorial. Aldedor de un 80% de esta enfermedad se presenta en niños y puede producir la muerte tras unas horas de presentarse los primeros síntomas. Por eso, el diagnóstico temprano es la única herramiento eficaz para estos casos tan graves y los padres deben estar preparados si se da una situación de alarma en el bebé puesto que la visita al hospital tendrá carácter urgente y prioritario, además de ser una notificación obligada ante el Sistema Sanitario de Salud Pública.
¿Qué es lo que se debe hacer para prevenir casos de meningitis?
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Vacunar correctamente a nuestro bebé según el calendario de vacunación ofical.
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Conocer los síntomas de sepsis y meningitis: suele realizarse un diágnostico temprano mediante un test conocido como el “test del vaso” que a continuación detallamos:
* Se buscan manchas alrededor del cuerpo del niño, sobretodo aquellas que sean pequeñas marcas marrones y de color rojizo y que pueden convertirse en moratón (en casos de sepsis, que también da lugar a meningitis).
* Presionamos con un vaso de cristal en la zona de las manchas o estiramos la piel, y si las marcas no desaparecen puede tratarse de un síntoma grave. Consulte lo antes posible con su médico.
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El médico debe informar de meningitis a la Salud Pública si se da el caso, además de administrar antibióticos como profilaxis a personas que puedan o sean susceptibles de contraer la enfermedad.
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Fiebre alta sin identificar causa siempre es sinónimo de infección. Si además aparecen petequeas (manchitas) que no desaparecen con la prueba del vaso, deben observarse contínuamente y dirigirse al centro médico más cercano lo más rápido posible. Otros comportamientos que puede observar en el bebé son: no quiere alimentarse, decaímiento,llanto muy grande al ser alzado de la cuna, rigidez corporal y movimientos rígidos.
Recuerda que aunque tu hijo esté vacunado de meningitis, existen algunos gérmenes que pueden causarla y que no existen vacunas para éstos. Si has comprendido la sintomatología de esta enfermedad y la tienes presente, estás aumentando las posibilidades de recuperación.
Como población susceptible a padecer meningitis encontramos a los niños menores de 5 años, adolescentes entre 15 y 24 años, y los mayores de 65 años. Los bebés tienen mayor riesgo de padecerla porque su sistema inmunitario no está tan desarrollado.